Accidente in itinere llevando a un compañero a casa

Ya hemos dedicado varias entradas a los accidentes in itinere, que son los que se producen yendo o volviendo al trabajo. Y son tan accidentes de trabajo como los que tienen lugar dentro de la jornada en las instalaciones de la empresa. Uno de los requisitos básicos es que no se rompa la unidad entre el trabajo y el descanso. Uno tiene un accidente in itinere en el trayecto de retirarse a descansar o al salir de casa camino del trabajo. En el momento en que de alguna manera inicia una actividad que tiene que ver con su vida personal (ir al supermercado, o a recoger a los niños al colegio, por ejemplo), el accidente que se pueda producir entra en las contingencias comunes.

Al Tribunal Supremo ha llegado recientemente un asunto peculiar en relación a un accidente de tráfico que se produce hora y media después de haber terminado la jornada laboral, habiendo realizado el trabajador desvío del trayecto que le llevaba a su casa. El desvío se evidencia porque la distancia entre el lugar del accidente y el punto de partida de salida del trabajo no le hubiera llevado más de 20 minutos. Y aún estaba lejos de su casa.

El trabajador fallece como consecuencia de ese accidente y sus herederas (mujer e hija) piden que se considere de trabajo in itinere. Ojo, sea laboral o no, es un accidente de tráfico que habrá sido en tal concepto indemnizado, ya que el responsable del mismo fue otro conductor y las indemnizaciones son absolutamente compatibles.

¿Por qué se somete a consideración el accidente en un marco temporal tan alejado de lo que se considera adecuado por la jurisprudencia? Porque el desvío del trayecto, y el tiempo intermedio empleado tenía una justificación relacionada con el trabajo. El fallecido llevaba a sus compañeros de trabajo, residentes en un pueblo diferente al suyo, a casa. El desvío, el trayecto, el tiempo empleado… tenía una relación directa con el trabajo. La costumbre de compartir vehículo y gastos de desplazamiento entre compañeros de una empresa es común y muy anterior a la existencia de BlaBlaCar o Uber, que al final no han inventado nada que no existiera ya.